El amigo Harry Calanche de Guatire nos envío fotos de la restauración que hizo junto a su equipo de un Blue Bird / Ford que parecía estar destinado morir solo, triste y abandonado y que ahora tiene una nueva vida.
Este autobús estaba guardado en un galpón llevando sol y agua donde fue avistado por el amigo Harry y posteriormente recuperado, actualmente no se encuentra laborando para alguna empresa porque aspira venderlo para buscar otro autobús para restaurarlo.
Saludos y felicitaciones al compañero y colega Harry; muy bueno el trabajo de restauracion, en verdad cada persona que se dedique a restaurar buses deberia hacerlo de esta manera, asi no habria tanta chatarra rodando por alli; con un trabajo como este da gusto abordar un bus bien conservado